Los tipos de personalidades basándonos en las necesidades de sueño y descanso de las personas

Seguramente tienes en tu lista de amigos o conocidos, a algunas o alguna persona a la cual le gusta despertarse muy temprano, para ir a trabajar, correr, o simplemente disfrutar su café y leer un poco.  

Al mismo tiempo, debes conocer a alguna o algunas personas de tu lista de contactos, que sabes que prefieren dormir todo lo que puedan en la mañana, o simplemente despertarse más tarde, para hacer las misma actividades que los que frecuentemente se despiertan más temprano. 

Sea como sea, esas diferencias en cuanto al sueño, y la hora de despertarse, se deben a si una persona es del tipo A, o del tipo B. 

Ahora te explicaré un poco sobre eso. 

Las personas del tipo A

Este tipo de persona, tiende a dormir tarde y despertarse muy temprano.

Entre sus características más destacables se encuentra que, pueden funcionar de igual manera que una persona que duerme lo suficiente por ejemplo, en el trabajo, incluso sin haber descansado las horas necesarias. 

Por ejemplo:

Digamos que Pablo, es un programador que trabaja en una empresa ficticia.

En su trabajo, se debe comenzar con las labores diarias a las 08:00 cada día.

Si pensamos en cómo debería ser el sueño de Pablo, entonces lo mejor para él sería que se acueste temprano y descanse, las 7 u 8 horas que se recomiendan para los adultos. 

Pero, a Pablo le gusta mucho salir de fiesta o por unos tragos incluso en los días de trabajo y suele acostarse a las 01:00 am. A veces, incluso se va a dormir a las 02:00 am. 

Cuando Pablo llega a su trabajo, cumple con todas las tareas y es efectivo como acostumbra. Esto pasa, aunque haya dormido solo 6 o 5 horas. 

Entonces Pablo, es una persona del tipo A, sin dudas. Estoy seguro que tu o algun conocido tuyo, tiene este tipo de rasgo. 

Las personas tipo B

Este tipo de persona, suelen necesitar más del descanso y el sueño para poder desempeñar sus tareas cotidianas. Prefieren tomar las cosas con más calma. 

Por ejemplo:

Digamos que, Juana es una trabajadora social.

En su trabajo debe de comenzar a trabajar a las 08:00 am cada día. 

Durante los primeros meses, Juana lo tenía difícil en cuanto al sueño y la hora de comenzar a trabajar. Se iba a dormir a las 24:00 pm y se despertaba a las 06:30 am para hacerse lista y manejar 40 minutos a la ciudad donde trabaja. 

Cuando  llegaba a su trabajo en la mañana, estaba muy cansada. Tan cansada que, durante la primera hora no se sentía efectiva.

No prestaba el servicio al nivel que se esperaba de ella.
Por eso, Juana decidió hacer una rutina en la cual se iría a la cama, cada noche a las 22:30 pm. 

Desde que cambió su hora de irse a dormir, todo cambió. Ahora Juana, llega a su trabajo y no se siente tan cansada.

Pero lo más importante es que presta su servicio con gran profesionalismo. 

Cómo ves, Juana es una persona del tipo B. Seguramente también te identificas con ella, o puedes identificar estos rasgos de personalidad en alguien que conoces. 

Eso no es todo

Además de las personas de tipo A y tipo B, podría existir una tercera categoría, según mi punto de vista. La llamaremos, la persona tipo mixta. 

La persona tipo mixta puede ser ese tipo de persona que tiene un ritmo de sueño y necesidad de descanso variado. Con esto me refiero a aquellos o aquellas que suelen dormir en horas estables algunos días y horas inestables otros. 

También me refiero a que, su desempeño no está marcado, o depende de cuantas horas de sueño tenías. En este tipo de persona, puede darse el caso de que aunque durmieron suficiente, necesitan tiempo para realizar las actividades que deben cumplir. Lo mismo les pasa si no durmieron lo suficiente. 

Comparando las personalidades tipo A, B y mixta desde el sueño, el descanso y la efectividad

En el mundo de hoy, se suele relacionar a las personas del tipo A con la efectividad, ambición, ganas de echar para adelante y alto grado de competitividad. Esto se pone de manifiesto en las empresas, donde se premia más al trabajador que está fresco y listo en la mañana.  

Ese que ya jugó su pádel con el colega del trabajo,  que ya tomó su café y se baño antes de las 06:00 am y por tanto está más que listo para sentarse en su oficina ya desde las 07:30 am. 

Esto es un error de la sociedad. No todas las personas tenemos el mismo sistema de reloj. Las personas del tipo B, también suelen ser efectivas, tienen grandes ambiciones y ganas de echar para delante. También son competitivas. 

La única diferencia es que, mientras los tipo A están realizando todas las actividades desde temprano, los tipo B, duermen o prefieren dormir. 

Pero cuando estos despiertan, sí harán sus actividades de igual manera y con igual grado de efectividad que los tipo A. Solo lo harán en otras horas. 

El mundo debe dejar de premiar a un tipo de persona y enfocarse más en el desempeño en general. No importa si prefieres trabajar desde las 09:00 am o desde las hora clásica 08:00 am. Lo que importa es lo que aportas, lo que das, como lo haces y qué resultados tienes al final del día o la tarde. 

Si eres un misto, tampoco debes sentirte menos o más. Solo has lo tuyo.

Entonces ahora ya sabes, si eres tipo A, B o tienes ambas cosas no estás en ventaja ni en desventaja con nadie.  

Duerme lo que necesitas